Usted puede tener una empresa hace diez año o diez semanas, planes, proyectos, metas y hasta soluciones para riesgo, pero no hay como gestionar las áreas, las acciones y el desarrollo de cada una de ellas, todo el esfuerzo en planificación y proyectos se van por el alcantarillado.
Esto por que es difícil seguir el desarrollo de una empresa sin los datos específicos y asertivos relacionado a cada área de la misma.
Para sanar este gap dentro de su empresa, lo que usted necesita es seguir el desarrollo de todas las áreas y acciones que ocurren diariamente. De esta forma, será más fácil saber cuán cercana está la conclusión de un proyecto. Por esto existen los indicadores de desempeño - o KPI (Key Performance Indicators)
Los indicadores analizan si proyectos, procesos, acciones e iniciativas están en andamiento de acuerdo con planes ya establecidos anteriormente para cada área. Si algo no está dentro de las conformidades, será notificado para que usted pueda tomas las decisiones al respecto.
Entre los principales tipos de indicadores de desempeño más usados están:
El de productividad, asociados a la utilización de los recursos de la empresa relacionados a las entregas.
Los de calidad, que funcionan junto a los de productividad, por ayudar a entender cualquier desvío o no conformidad que haya ocurrido durante el proceso productivo,
Los de capacidad evalúan la habilidad de respuesta de un proceso;
Los estratégicos muestran como la empresa se encuentra con relación a los objetivos que fueron establecidos anteriormente.
Para controlar y visualizar estos indicadores se necesita una solución completa, que alcance desde el equipo externo, que va a campo, hasta los planes y metas. La Trade Force es un ejemplo de esto. La herramienta gestiona equipos de campo, optimiza rutas, valida datos importantes del PDV, como rupturas y stock, todo en tiempo real por medio de internet.
Este tipo de solución permite que todos los órganos gestores de diferentes áreas tengan acceso a los indicadores de desempeño en tiempo real. De esta forma, es más fácil alcanzar metas, colocar planes en prácticas y descubrir en qué punto, exactamente, es necesario invertir más o cambiar lo que se hace para alcanzar el objetivo.
De este modo, proyectos y planes no quedan acumulados y/o perdidos entre papeles encima de la mesa de documentos guardados en el computador. Además de esto, usted y los gestores podrán hacer inversiones de manera más asertiva, en áreas que estén, de hecho, con alguna discrepancia.